Sonntag, 31. August 2008

Blanquirrojo



Ahora ya no lo puedo negar: tengo un "faible" por las blanquirrojas. Las banderas. Se están convirtiendo en el hilo conductor de mis andanzas a través del mundo. Después de dejar el país con la famosa cruz blanca sobre un fondo rojo (Suiza), llegué al blanquirojísimo Perú (al cuál me llevó un barco cuya tripulación me regaló al desembarcar al Callao su bandera nacional - la blanquirroja polaca), y ahora empiezo a vivir en otro país blanquirrojo, otra vez con cruz blanca sobre fondo rojo: Dinamarca. La canción "Dios pintó mi alma blanquirrojo" evidentemente está hecha para mi.
De la gente que vive acá, los daneses, todavía no puedo decir nada. Solo que hablan un idioma para mí todavía inentendible, con palabras como "gullerodebrod", que lo debes pronunciar como si quisieras silbarlo (así tu boca logra pronunciar los sonidos necesarios), que además designa un pan de zanahoría, muy rico. Y eso si, los daneses parecen amar a su blanquirroja aún más que los peruanos, la ves por todos lados, hasta las ofertas comerciales van junto con una blanquirroja.

Hasta navidad estaré en Arhus, Dinamarca, y aunque pasaré un buen tiempo estudiando temas como globalización, política de medios, y diversidad cultural en un grupo de jóvenes periodistas del mundo entero, tengo la firme intención de no solo globalizarme, sino "localizarme" y descubrir algunas historias de este país blanquirrojo, Dinamarca. De ello les quiero contar en este blog. Lo haré en castellano, primero porque ya tengo mas amigas y amigos que sepan castellano que alemán, y segundo, porque mi mirada sobre Dinamarca ya no es la tipica alemana. Es una mirada bien blanquirroja, marcada por mis casi diez anhos en el Perú. Asi que les invito a visitarme y leerme de vez en cuando. Y por supuesto, hacerme llegar sus comentarios.